El viejo campesino



Había una vez, un viejo campesino que pasó toda su vida en cuidar su hermoso jardín. Todas las mañanas, el viejo campesino se levantaba muy temprano para que a sus flores no les faltara nada y se sentía estupendamente cuando veía como sus flores le agradecían día y noche la dedicación que se tomaba con ellas.

Sin embargo, algo invadía el alma y la vida del viejo campesino que todo lo hacía por sus plantas. Julián, que así se hacía llamar el hombre, nunca había podido ser padre y esto era una de las cosas que más le entusiasmaban en la vida.

El viejo Julián desde que era muy joven, soñaba con la idea de tener un hijo a quien cuidar y proteger. No obstante, el viejo Julián nunca había tenido la ocasión de conocer una dama con la que poder formar una familia.

Un buen día, Julián estaba caminando por las afueras de su jardín y se encontró una flor marchita en el suelo. La pequeña flor estaba muy débil porque las tormentas y los cambios estacionales la habían dejado sin fuerza alguna y la habían dejado a su suerte.

Julián sintió un fuerte golpe al ver que esa flor estaba indefensa en el suelo y que no se podía casi ni mover. ¿Qué te ocurre pequeña?, ¿Quién te hizo estas cosas? –preguntó el campesino– Los vendavales me han dejado sin pétalos y estoy muy triste señor campesino.

El campesino Julián tomó a la flor y se la llevó a su jardín para que estuviera con las demás flores disfrutando de la vida. La flor agradecida le preguntó al campesino qué era lo que podía hacer por él ante tanta amabilidad. Entonces, el campesino confesó a su nueva flor las ganas de ser padre que siempre había tenido.

No pasó mucho tiempo, cuando una mañana en el lugar de la flor nueva que había plantado, el viejo campesino se encontró a un niño pequeño en una canasta, con una carta que decía ‘Me da mucha pena, pero no puedo cuidar a mi niño.

He visto como cuidas a tus plantas, espero puedas cuidar también a mi bebé, espero volver a verlo algún día’. Y desde entonces, el viejo campesino cuido al niño y fueron muy felices los dos cuidando sus cultivos y sus jardines.

Cuento infantil: El viejo campesino.
Autor: Cuentos cortos para niños.
Cuentos infantiles.

AHORA CUÉNTANOS...
¿QUÉ TE HA PARECIDO ÉSTE CUENTO?

Te invitamos a dejarnos un comentario, una recomendación o una sugerencia en la caja de comentarios que se encuentra aquí abajo.

Te dejamos también otros cuentos relacionados a éste que te pueden gustar.

¿Quieres recibir un correo cada que publiquemos un cuento nuevo?
Suscribete a cuentos cortos infantiles dando clic aquí.

Comentarios

Cuéntanos que te ha parecido éste cuento dejando un comentario